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Hubo un tiempo en que, hostigado por su tía paterna, su querida chacha María, firmó con el primer apellido, PÉREZ, honrando así la memoria del padre fallecido cuando él tan sólo contaba doce años...
Muestra de ello son algunos de los dibujos que realizó en PARÍS en diciembre de 1974.
Pero estas cuatro nuevas adquisiciones de LA ROSA DEL VIETNAM, que pasan a engrosar su FONDO, dejan constancia de que Ocaña, como su amigo CAMILO, también lo hizo en árabe...
اُكانيا, UKANIA, así más o menos firmó estos cuatro dibujos, que tienen la particularidad de presentar las tres rúbricas...
¿Pero, por qué? ¿Huella, quizás, de su paso por TÁNGER a finales de 1975? NAZARIO, en su PLAZA REAL SAFARI, nos da algunas pistas más sobre el amor que OCAÑA sentía por el mundo árabe...
En aquella época había una pensión en el piso de abajo, frecuentada por jóvenes árabes.
En el pasillo común de la casa, una cristalera dejaba ver el WC de la pensión. No era raro llegar y encontrar a Ocaña atisbando, descalzo, la polla del moro de turno meando. Con silenciosos aspavientos nos indicaba que no hiciéramos ruido. Unas veces el chico se daba cuenta y Ocaña lo invitaba a subir, y otras cerraba la ventanilla de golpe. (P. 145.)
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